montoya1_Drew AngererGetty Images_google Drew Angerer/Getty Images

El peligroso secreto del juicio a Google

WASHINGTON D. C. – El mayor juicio antimonopolio de la era moderna de Internet, que terminó el mes pasado, enfrentó al motor de búsqueda más popular del mundo, Google, con el Departamento de Justicia (DOJ, por su sigla en inglés) de Estados Unidos. La causa nos recuerda al hito que marcó el juicio del DOJ contra Microsoft en la década de 1990, pero con una diferencia fundamental: se llevó a cabo, en su mayor parte, a puertas cerradas. Este secreto sin precedentes implicó que solo los periodistas y observadores físicamente presentes en la sala tuvieran acceso —aunque limitado— al proceso judicial.

La misión declarada de Google es lograr que la información del mundo esté al alcance de todos, pero sus acciones durante el juicio —en el que se la acusó de mantener ilegalmente un monopolio en las búsquedas y la publicidad— muestran un marcado contraste con ese credo. También sentaron un precedente peligroso: una empresa privada, con el objetivo de proteger sus actividades principales y reputación, convenció a un tribunal de limitar la transparencia y el acceso público a la información, socavando la libertad de prensa y limitando la cobertura informativa del juicio, tanto en EE. UU. como en el extranjero.

Desde el primer momento, Google se esforzó mucho por esconder toda la información posible del público. La empresa presentó una objeción al tribunal, que fue aceptada, contra la difusión de audio en tiempo real del proceso judicial, y se las ingenió para convencer al juez de secuestrar los testimonios de testigos clave, sosteniendo que en un tribunal abierto se corría el riesgo de divulgar secretos comerciales. A medida que el juicio perdía intensidad, Google se opuso también a que el DOJ publicara evidencia en su sitio web, lo que llevó a su eliminación durante toda una semana. El periódico The New York Times, con el apoyo de otras publicaciones, elevó un recurso exigiendo al tribunal que otorgara acceso a los periodistas a las pruebas aceptadas para el juicio.

https://prosyn.org/nLYnpzyes